Guía práctica para pasar miedo en Valonia

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Si hay algo intangible que caracteriza a Valonia es la inmensa hospitalidad de sus habitantes. Pero, en contra de esto, la región del sur de Bélgica también sabe convertirse en territorio hostil, solo por unos días al año y sin despojarse de su amabilidad: en época del Halloween. En territorio valón esta festividad es una fecha importante marcada en el calendario y esta zona de Bélgica posee caminos sombríos, torres tenebrosas o figuras escalofriantes; que, con el cambio de horario y la reducción de horas de Sol, se transforman en escenarios realmente terroríficos:

La torre de Eben Ezer

Alzada en 1960, en un lugar aislado del Valle de Geer, es una fortaleza de 7 pisos que culmina en una terraza donde la ‘vigilan’ cuatro majestuosas figuras en forma de animal y que actúan como gárgolas – un toro, león, águila y esfinge. Su construcción tiene muchas referencias bíblicas – como el hecho de tener siete pisos, o medir 33 metros – y es un edificio realmente imponente. En los alrededores hay una curiosa y no menos aterradora exposición de objetos extraños que lo convierte en un lugar idóneo para los amantes del miedo.

El edificio fue construido con sílex, ya que, su ideador, Robert Garcet, trabajaba en el sector e incluso en el interior hay un espacio didáctico dedicado a este material.

El Sendero de Etrange

Su nombre significa misterio. Curioso y original, es un paseo de 5 km en el cual se descubren representaciones de brujas, hombres lobos y otras criaturas. Incluso de día, transmite cierto terror y no es tarea fácil recorrerlo sin compañía. La idea de crear esta ‘exposición’ al aire libre fue del artista Watkyne, que la inició en 1984, y, desde entonces, cada año se ha incluido alguna nueva y espeluznante obra.

La Gruta Saint-Antoine de Crupet

Cerca de la capital Namur, precisamente en el pueblo de Crupet, se alza esta caverna que se construyó por orden de su párroco hace relativamente poco, en 1900. Como su nombre indica, el sitio alberga escenas de la vida de San Antonio, reconstruidas con yeso y estatuas de hierro fundido. Pero, sin duda, la más conocida e imponente es la del diablo alado, que también es la que crea a su alrededor una atmósfera espeluznante.

El castillo de Reinhardstein

Una fortificación que se alza en un escarpado acantilado y rodeada de un frondoso bosque, en la cual no vivió nadie durante más de un siglo y medio.  Quizá un día soleado de primavera no es el lugar más tenebroso de Valonia -organizan actividades para niños, como tiro con arco-, pero su ambiente cambia de forma significativa en un día gris, con lluvia y tormenta.

El parque de atracciones de Walibi

Es conocido como el mayor y más terrorífico evento de Halloween de toda Bélgica. El programa de actividades se divide entre ‘zonas de miedo’, donde los visitantes entren en una especie de escape room al aire libre donde con toda certeza serán asustados; casas encantadas y espectáculos.